Los humanos somos indiscutiblemente impredecibles, en consecuencia nuestras actitudes se manifiestan de igual modo. La herencia, el entorno y nuestra propia esencia son los elementos fundamentales que moldean nuestras conductas....

En cada cuento o escrito se encuentran enmarcados un comportamiento diferente, una naturaleza diferente, un demonio diferente....

martes, 31 de enero de 2012

Lisonjeos.

“Los cazadores atrapan las liebres con los perros; muchos hombres atrapan a los ignorantes con la adulación”.
Plutarco.

Muchos seres humanos somos sensibles a esta “maniobra”, que no es otra cosa que una subrepticia trampa erigida por nuestros enemigos con un fin determinado, porque su efecto es embriagador y como tal nubla al pensamiento, situándonos en la cuna del facilismo empobrecedor. Sin embargo,  es muy común que confundamos esta acción con “reconocimiento”, pues a simple vista se muestran muy parecidas, pero la diferencia que existe entre ellas es abismal, ya que “reconocer” habla de valoraciòn o admiración por una persona o por su creación.

Seguramente, nuestra baja estima o nuestras carencias afectivas nos pueden hacer caer en las garras de nuestro depredador, pero no si lo detectamos, aunque no será fácil  puesto que  el adulador se esconde bajo el disfraz de la amabilidad y la bondad, aprovechàndose despiadadamente de nuestro talòn de Aquiles, articulando argumentos que básicamente no son ciertos.

Pero por el contrario, si estamos seguros de nosotros mismos, si sabemos quiènes y còmo somos, sabremos también, identificar y desechar a este tipo de personas, porque no necesitamos  las alabanzas como motivación (de hecho no lo es), porque también sabremos ver nuestros propios valores y a todos aquellos que sinceramente nos quieren y de quienes debemos aceptar sus crìticas que indudablemente constituyen una nutriente para nuestro crecimiento.




domingo, 29 de enero de 2012

Camino al infierno.


“El que domina a los otros es fuerte; el que se domina a sí mismo es poderoso”.
Lao Tse.

Indudablemente el filòsofo se referìa a la fortaleza individual, al individuo que como ejemplar único se debe fidelidad a sì mismo, respetando sus pensamientos, sus creencias, su esencia….

Es de suponer que a medida que vamos transcurriendo en el tiempo experimentamos cambios, no sòlo en nuestro físico, sino también en nuestra mente y que todo el conjunto de factores externos e internos van moldeando nuestro carácter, nuestra exclusiva “forma de ser”, digo “es de suponer”, porque no siempre evolucionamos o crecemos  favorablemente respetando la cronología propiamente dicha, hay fenómenos en los que notamos una madurez y una fortaleza muy temprana o como contraposición la inmadurez o la debilidad llevada hasta la longevidad.

Este último caso nos condiciona a permeabilizar todos los vicios, a no saber què  queremos en cada una de las etapas de nuestras vidas, muchas veces nos convertimos en caminantes sin rumbo atrayendo hacia sì las influencias de los entornos ocasionales, que muchas veces, como corderos obedientes respondemos a sus beneficios ya sean lucrativos o placenteros, nos deslumbramos ante la frivolidad, creamos falsos ídolos a quienes rendimos culto, moldeando nuestro comportamiento y pensamiento de acuerdo a las circunstancias, por el simple hecho de admirar su estilo de vida….



martes, 24 de enero de 2012

Carnaval de Venecia.

"Sírvete de lo aparente como indicio de lo inaparente".
Solòn de Atenas.

Para quienes basamos nuestras labores en las relaciones interpersonales, el pensamiento del legislador griego constituye una excelente premisa para establecer vínculos y cuyo requerimiento no es otro que la observación desde toda perspectiva…..

La humanidad està atravesando por la mayor crisis de valores jamàs vista en la historia y a consecuencia de ello, el poder y el exitismo se disputan el primer puesto del ranking, que desde hace tiempo nos colocara en la disyuntiva entre la verdad y la mentira, pero hoy la posiciòn es muy clara: las “apariencias” se convirtieron en el eje de nuestra existencia.

Hemos desarrollado la capacidad de aparentar, desde que podemos ser buenas personas hasta que poseemos una gran solvencia económica, pasando por todos los estados que se nos ocurra, siendo la hipocresía y la mentira los principales principios en los que basamos nuestras vidas, empujándonos a cometer actos atroces sin reparar en los daños que traen aparejados, por el simple hecho de  negar nuestra verdadera esencia.


Creo que el quid de la cuestión radica en el interrogante de la mentira, mentimos porque no aceptamos quiènes somos ni còmo somos, mentimos porque no nos gustan las circunstancias en las que nos tocò vivir, mentimos porque pretendemos que nos quieran, es decir, mentimos porque pretendemos ser el monstruo que inventamos, tapando lo que somos, pero en algún momento el hilo de màscara de vuelve visible. Bàsicamente esta conducta pone al desnudo nuestras inseguridades y debilidades y nada tienen que ver con el crecimiento o realizaciones personales.
 ¡¿ Terrible verdad?!