Los humanos somos indiscutiblemente impredecibles, en consecuencia nuestras actitudes se manifiestan de igual modo. La herencia, el entorno y nuestra propia esencia son los elementos fundamentales que moldean nuestras conductas....

En cada cuento o escrito se encuentran enmarcados un comportamiento diferente, una naturaleza diferente, un demonio diferente....

martes, 25 de septiembre de 2012

Fantasmas en la oscuridad.


Alcides, con actitud de rezongo, cerró su laptop y la guardó cuidadosamente en la mesita de luz de su cuarto, tras la orden de la enfermera a cargo del turno de la noche, murmurándole que era uno de los internos privilegiados en la casa de reposo de ancianos.

Durante sus últimos quince años anteriores a su retiro jubilatorio, se había desempeñado como asistente personal de Jonás Santamarina, un famoso y reconocido director cinematográfico contemporáneo, a quien admiraba con una buena dosis de envidia por su talento, sus éxitos, su gran creatividad y por sobre todas las cosas, por la gran fortuna que el joven director supo amasar en tan pocos años.

Alcides fue la sombra de Jonás, fueron quince años de convivencia permanente, desde que se despertaban hasta que se dormían, le conocía profundamente, sus gustos sobre comidas, bebidas, literatura, música; conocía cada uno de sus pensamientos. Jonás era único hijo de una familia de clase media acomodada, casado con Juliana, hermosa mujer como pocas, hacían un bella pareja, tuvieron un hijo, Francisco un hermoso retoño de 3 años al cual Alcides muchas de sus tardes ha tenido que cuidar.

En cambio Alcides provenía de una familia humilde, era el menor de ocho hermanos, su madre dedicó su vida a la crianza de sus hijos en la precaria vivienda que alquilaban en el barrio porteño de Barracas y su padre trabajaba en el puerto por un magro salario y pese a ello era afecto a la bebida, vicio que heredó de su padre, sin embargo nunca tuvo una pareja estable, estaba condenado a la soledad y esa condición lo había resentido mucho.

Jonás siempre le concedió a su viejo empleado todas las libertades, pues éste entraba y salía de la casa a gusto, hasta incluso podía usar algunos de sus automóviles, pues volver a altas horas de la noche del microcentro a La Horqueta era casi imposible.
En muchas oportunidades, el viejo, solía salir de putas y enmascarado con la personalidad de su amo, conquistaba y seducía a cuanta señorita de la noche se le cruzara prometiéndoles algún rol en alguna película. Había conquistado mucha gente de esa manera, hombres y mujeres caían en su trampa como moscas en la miel, pero hábilmente tomaba distancia cuando se sentía acorralado.

Como el sexo pago le estaba destrozando el presupuesto y su grado de locura iba in-crescendo día a día, no escatimó esfuerzos en desplegar todas sus armas con otro tipo de mujeres, tal vez ávidas de afecto o reconocimiento, el viejo tenía olfato para elegir a sus víctimas.

Su vida comenzaba a desbarrancarse cuando una de sus mujeres engañadas se presentó en el estudio cinematográfico, preguntando por el director para reclamarle por un prometido papel que interpretaría en una de sus películas, Jonás no dudó en atenderla, pero la muchacha insistía en hablar con el director, intentó tranquilizarla y adivinando de qué se trataba, le explicó que él era el director y que le pedía disculpas por haber sido engañada en su nombre.

Al regresar a su casa, Jonás no dudó un solo minuto en despedir a ese viejo loco en quien había confiado en tantos años y sabiendo que el pobre hombre no tendría donde colocar sus huesos se ocupó de buscar un geriátrico para su retiro, aunque bien pensó que debería ser internado en un hospital psiquiátrico.

Para Alcides ya no había diferencia entre aquella vida y ésta que comenzaba, todo le daba igual, pasaba todas las horas del día conectado a Internet husmeando por las redes sociales, provocando escándalos en algunos sitios interactivos y en nombre de Santamarina continuaba buscando víctimas virtuales.



12 comentarios:

  1. Gracias Cantares, un abrazo enorme!!!

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  2. Excelente!!!
    muy buena la historia!!!

    Feliz 2011! estaba desaparecida porque estaba de vacaciones, alejada de todo.

    beso grande

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  3. Hola Virgina, gracias por venir a mi casa. Un abrazo enorme y Feliz año nuevo!!!

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  4. Holis amiga estupendo relato!! Y cuantos Alcides hay.
    Ese tema musical me encanta hize algún tiempo un cuento sobre ello, aqui hay una novela que usa esta canción donde la protag es eso una auténtica mal parida jaja ya lleva varios asesinatos.
    Besito un gusto visitarte

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  5. Hola Melody, que placer y alegría me da verte por mi casita!!

    Si, en Argentina hay una novela cuyo tema musical es éste y precisamente la novela se llama "Malparida", supe que es una asesina serial o algo así....

    Un fuerte abrazo.

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  6. ¡Hola amiga! me encanta este lugarcito, ¿será que todos en algún momento estamos en el infierno?, la decoración original como la dueña.

    Este cuento lo archivaría en el cajón de la soberbia, pero sinceramente siento pena por los "Alcides" mantener un personaje continuamente en escena quema al actor.

    Besitos, ya sabes que a veces no trino pero siempre me posaré el el alféizar de tu ventana dejando aleteos llenos de cariño.

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  7. hola Sibaris,
    Alcides suele ser ese típico hombre que va por la vida sin fin específico. Talvés se hizo como fin el buscar víctimas, asi como tu cuentas.
    Interesante historia.

    un abrazo^^

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  8. Así es Rebecca, los Alcides son seres opacos, que en el afán de brillar, cobran determinadas actitudes, que en algún momento dejan a la vista el resentimiento
    Gracias por visitar mi casa!!!

    Un abrazo fuerte!!

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  9. Hola Alondra!!!!!!!
    Me alegro que te haya gustado la decoración, creo que está mas acorde al contenido, jajajaja!!
    A mi también me dan mucha pena los Alcides, son víctimas de su propia obsesión!!!
    Un abrazo enorme lleno de besos!!!

    TKM

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  10. Hola Sibaris, me impactó tu relato.
    Seguramente son muchos los Alcides por las calles escondidos detrás de trajes oscuros como sus vidas.

    Un fuerte abrazo, buen finde.

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  11. Gracias roberto. Ciertamente hay muchos..., ojalà sean de vuelo corto y puedan ser desenmascarados, por el bien de muchos e inclusive de ellos mismos.

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